sábado, 27 de agosto de 2016

Venezuela y el costo de oportunidad

El Costo de Oportunidad: concepto económico que hoy en Venezuela recobra alta relevancia. El mismo lo podemos definir como el valor de la mejor alternativa posible a la que se renuncia para llevar a cabo una acción o decisión económica.
En la actualidad, los venezolanos nos vemos sometidos a un estrés constante tratando de dilucidar cuáles decisiones tomar en asuntos tan básicos tales como: comer, vestirnos, estudiar, entretenernos, etc.

No es posible que en pleno siglo XXI, adquirir los productos básicos para alimentarnos, vestirnos y asearnos por ejemplo tengamos que escoger uno porque no podemos realizarlos todos de manera simultánea como antes solíamos hacerlo.
La política económica vigente en Venezuela plagada de controles y restricciones tiene al país parado y en la improductividad, ello se refleja en empresas y, comercios cerrados, poca oferta de productos, desempleo y bajo poder adquisitivo. ¿Hasta cuándo se va a continuar transitando por el camino errado?

Los venezolanos estamos agotados de estar aplicando el costo de oportunidad al detalle en cualquier ámbito de nuestras vidas. Comer, vestirse y asearse deben ser hábitos rutinarios y no un dilema, en el que tengamos que decidir dejar de comprar ropa nueva, por ejemplo, porque la decisión racional y vital es comer. Parece una tontería pero así estamos sobreviviendo los venezolanos.

Vivir con dignidad en este país se ha convertido en una odisea diaria que está acabando con los sueños, la esperanza y el crecimiento de cualquier ciudadano, que solo desea ver a sus hijos y familia progresar en el ámbito personal, profesional en un país que antes brindaba muchas oportunidades de desarrollo a locales y a otros venidos de tierras lejanas.

Ya es hora que Venezuela retome el rumbo perdido, si es cierto que en tiempos pasado la abundancia encegueció a muchos, principalmente, a los encargados de administrar el dinero público; los cuales por cierto deben ser citados ante los tribunales correspondientes para que rindan cuenta ante país y le expliquen a los venezolanos qué hicieron con el dinero sustraído y por qué la grave crisis económica de hoy.

Estamos en un momento de emergencia, hay que pasar la página y comenzar implementar las medidas socio económicas pertinentes para levantar y reconstruir el nuevo modelo productivo que lance a Venezuela a los mercados internacionales del cual nunca debió salir.